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miércoles, 1 de noviembre de 2017

CONSEJO PARA SENDERISTAS: CÓMO CUIDAR TUS PIES

VIAJE Y AVENTURAS 
Prueba estos consejos de un atleta de aventura profesional para mantener tus pies sanos: ¡eficacia comprobada! Miércoles, 25 Octubre Por Andrew Skurka Un excursionista deja airear las ampollas de sus pies sentado en un tronco caído en Anchorage, Alaska. FOTO POR KERI OBERLY, AURORA Unos kilómetros antes de llegar a nuestro primer campamento, Gerry me dijo que creía que le estaban saliendo algunas ampollas. Deberíamos haber sabido qué hacer al respecto, especialmente sabiendo que la salud de los pies era vital para nuestra travesía, pero decidimos tratarlas más tarde. Cuando vi los pies de Gerry en el campamento, enseguida me arrepentí de nuestra decisión y sentí que le había decepcionado. 

Él era un atleta de resistencia experimentado, pero confiaba en mis conocimientos de senderismo para completar una ambiciosa excursión de siete días en el John Muir Trail, de 360 kilómetros. Ahora, Gerry tenía ampollas del tamaño de un centavo en la almohadilla de cada pie (zona del metatarso) que, según temía, aumentarían de tamaño y el dolor que aumentaría de forma proporcional. Todo ello hacía que nuestro objetivo pareciese menos viable. Al intentar tratar las ampollas, probamos cada uno de los remedios de libro. 

Al menos una vez al día, aplicábamos vendajes nuevos para ampollas y en ocasiones incluso empleamos cinta de vendaje neuromuscular y una pomada curativa. Gerry aireaba los pies en cada parada que hacíamos para descansar y los mantenía calientes y secos cada noche. En una ocasión incluso lo llevé a cuestas a través de un río para que pudiera mantener los zapatos secos. Probamos con varios pares de calcetines y abrimos agujeros en las plantillas para aliviar la presión. Sigue leyendo: Así es la vida real de las «supermujeres» que practican deportes de aventura 

Una excursionista en el Sendero de los Apalaches se venda las ampollas para evitar dolor y otras lesiones. FOTO POR MICHAEL D. WILSON, AURORA Por desgracia, lo hecho, hecho estaba, y la recuperación no comenzaría hasta que alcanzáramos el monte Whitney o nos rindiéramos. Gerry, que fue excepcionalmente duro, se negó a detenerse antes de alcanzar el punto más alto de los Estados Unidos contiguos, al que, increíblemente, llegamos según lo previsto. Para evitar la experiencia que vivió Gerry, necesitarás mantener la salud de tus pies. Si lo haces, será más probable que tengas unos pies felices, lo que te convertirá en un senderista feliz. 

Estas cuatro tácticas básicas me han sido útiles durante años: 

Tratamiento preventivo 

Perder entre cinco y diez minutos al principio podrá ahorrarte horas de tiempo perdido (o kilómetros de caminatas dolorosas) más adelante. Antes de echarme a andar o salir del campamento siquiera, protejo las zonas donde suelen aparecer ampollas con vendaje neuromuscular. Si noto un «punto caliente» que comienza a aparecer después de haber empezado a caminar, protejo la piel irritada inmediatamente, antes de que se convierta en una ampolla. Me corto las uñas con frecuencia para evitar que se formen ampollas debajo y las limo para no dejar que se formen bordes afilados que pudieran provocar cortes en los dedos del pie adyacentes o que se me enganchen en los calcetines. 

Te puede interesar:

Calcetines limpios, secos y calientes 
Lavo los calcetines a diario por fuera y por dentro con jabón para evitar que la arena o la materia orgánica me rocen la piel. Me quito los zapatos y los calcetines al menos una vez al día para dejar que los pies se sequen y se aireen. Por la noche, me pongo un par de calcetines limpios, secos y calientes, algo que ayuda a que mis pies se recuperen durante la noche para que puedan aguantar otro día de larga caminata. 

Gestión de la humedad 

Cuando los pies están húmedos, la capa exterior de la piel absorbe el agua y se arruga o se macera. Los pies macerados pican, duelen y son más propensos a tener ampollas. Además, pueden agrietarse después de secarse. Sin embargo, no conozco ninguna técnica para mantener los pies secos en condiciones húmedas prolongadas. He experimentado con todas las soluciones imaginables, incluyendo zapatos impermeables, calcetines impermeables e incluso botas de goma, pero ninguna funciona. 
En lugar de eso, simplemente minimizo los efectos de los pies húmedos. Por la noche, después de que se me sequen los pies, me echo pomada curativa natural. La pomada me humedece la piel y actúa como aislante frente al agua, lo que ayuda a reducir la maceración al día siguiente. Funciona mejor cuando se deja varias horas para que se absorba en la piel. No sirve de mucho si se aplica inmediatamente después que se te humedezcan los pies. 

También llevo calcetines finos y zapatos no impermeables fabricados con materiales de baja absorción, que no retienen tanta agua como los calcetines gruesos, las botas convencionales o el calzado impermeable. Además, se secan mucho más rápido.  

Calzado apto para muchos kilómetros 

Antes de decidir llevar unos calcetines o unos zapatos nuevos en un viaje largo, los pongo a prueba en excursiones de baja intensidad. Por lo general, me gustan los zapatos poco voluminosos con un tacón seguro, espaciosos y con abundante protección delantera y amortiguación, pero sin soportes «correctores», como las de la parte medial. Una biomecánica deficiente o un sistema muscular débil pueden ser remediados en parte por ortesis o plantillas para el arco plantar. Y las ampollas entre los dedos del pie pueden resolverse con calcetines de dedos, como los de Injinji http://www.nationalgeographic.es/viaje-y-aventuras/2017/10/consejos-para-senderistas-como-cuidar-tus-pies

LAS UÑAS ENCARNADAS DE LOS CORREDORES

Las uñas encarnadas son un verdadero problema para los corredores; si aparecen es probable que se infecten y dar un paso sin dolor sea una misión imposible. La onicocriptosis o uña encarnada, es una patología que se produce cuando la uña comienza a crecer en la piel que rodea los dedos del pie. Las uñas encarnadas pueden ser extremadamente dolorosas, ya que el daño que genera el choque de la uña con la piel suele generar una infección sumamente molesta. Algunos corredores tienen una predisposición a sufrir de las uñas encarnadas. 

Otros comienzan a padecerlas luego de algún trauma, como un golpe. El uso de zapatillas con suela estrecha, pequeñas o hasta calcetines demasiado gruesos, pueden ser otras de las posibles causas. Las uñas encarnadas pueden ser un problema menor (siempre que se las controle) o una verdadera tortura (cuando llega la infección) y por ello es muy importante saber cómo reaccionar ante los primeros estadíos. 

Cometer el error de dejar que las uñas encarnadas empeoren, es probable que signifique que tengas que terminar asistiendo al podólogo y utilizar técnicas invasivas que incluyen cortar con bisturí en la zona. Por ello, a continuación te explicaremos algunas técnicas que te ayudarán a controlar las uñas encarnadas, evitar las infecciones y el bisturí. 

UÑAS ENCARNADAS BAJO CONTROL 
– Cortar las uñas de forma correcta 
– Inmersión 
– Descalzo/punteras anchas 
-Controles periódicos 
– La última alternativa 

UÑAS ENCARNADAS BAJO CONTROL 

Para que no tengas que recurrir al podólogo y someterte a técnicas invasivas, te invitamos a probar estas técnicas: 
– Cortar las uñas de forma correcta
En vez de cortar tus uñas dándole forma redonda y permitir que los bordes dañen tu piel, corta las uñas de forma más recta. Evita cortar exagerádamente las uñas. Es vital que evites dañar la zona o irritarla. Utiliza material desinfectado y evita ser demasiado invasivo. 
– Inmersión 
En las primeras etapas de las uñas encarnadas, cuando no existe infección, limpiar bien el dedo con jabón y agua y luego sumergir el dedo del pie en agua tibia con sal durante 20 a 30 minutos cuatro veces al día puede contribuir a evitar mayores problemas. Posteriormente, secar correctamente el dedo y aplicarle algún tipo de antiséptico local. I


IMPORTANTE 

Si eres un corredor que padece de diabetes es importante que visites a tu médico ante los primeros signos de cualquier problema en tus pies y dedos (por más que sean menores). 

– Descalzo/punteras anchas 
Andar descalzo la mayor parte del tiempo, te permitirá evitar la humedad y la presión en la zona y así evitar empeorar la situación. Sino puedes andar descalzo, utilizar calzado con punteras anchas que no obligue que tus dedos estén presionados, también será de ayuda. 

-Controles periódicos 
Si eres un corredor que suele padecer de uñas encarnadas, nunca te olvides de realizar controles periódicos de tus pies. Al terminar de bañarte, secar bien tus pies y controlar que tus uñas estén en correctas condiciones, será una costumbre que te ayudará a evitar las uñas encarnadas. uña encarnada

– La última alternativa 
Si eres tienes una uña encarnada que aún no se ha infectado, puedes realizar una última prueba para evitar que se infecte y el bisturí. La técnica consistirá en sumergir tu pie en agua tibia y sal durante 10 minutos para que tu uña se ablande y sea más fácil manipularla. Luego deberás utilizar un pequeño trozo de algodón y ubicarlo debajo de la uña afectada (haciendo presión para que quede bien sujeto). Cambiar el algodón diariamente (1 o 2 veces por día) y aplicar algún antiséptico local. El objetivo de esta técnica será que la uña crezca sin dañar la zona y tomando una forma que no dañe la piel y aumente el riesgo de infección.
https://runfitners.com/unas-encarnadas-tecnicas-evitar-bisturi/

martes, 29 de agosto de 2017

viernes, 26 de mayo de 2017

sábado, 25 de febrero de 2017

jueves, 22 de septiembre de 2016

domingo, 28 de febrero de 2016

jueves, 4 de febrero de 2016

LA PISADA.TALÓN Y ARCO. CONSEJOS PARA APOYAR MEJOR EL PIE

Muchas veces, una molestia o dolor como podría ser en la rodilla, puede estar producido por una mala pisada. En este artículo nos vamos a centrar principalmente en el apoyo del arco del pie y del talón. Por norma general y para aquellas personas que no sufren de pie plano, podemos decir que un buen apoyo plantar consiste en una posición en la que el talón quede ligeramente por encima de los dedos y donde el arco del pie quede bien apoyado. 

Últimamente, el calzado que se vende es muy plano y no cumplen estas características básicas. Si a eso le sumamos que cambiamos de calzado varias veces, el pie tiene que adaptarse a las diferentes pisadas y eso repercute no solo en el pie, sino en articulaciones próximas como la rodilla, en músculos como los gemelos e incluso a la columna, ya que los pies, es la base de toda nuestra estructura. El calzado deportivo es el que más se aproxima. 

Consecuencias que produce no apoyar correctamente el arco plantar: Si la plantilla o la superficie del calzado no tiene una elevación en la cara interna, el arco no se apoyará correctamente y eso puede producir dolores en el pie, el tobillo, la rodilla, trastornos en la cadera y tensión en los gemelos. 
Si vemos que nuestro calzado es muy plano, podemos hacer lo siguiente para intentar que apoye mejor el arco: Colocamos el pie en una superficie plana. Introducimos un trozo de algodón en el hueco del arco y lo vamos apretando con los dedos hasta que quede introducido completamente para que así, tome la forma de nuestro arco. Ahora colocamos el trozo de algodón debajo de la plantilla, del lado interno de cada calzado. Al introducir el pie, debemos notar como el arco está apoyado pero sin estar forzado. Si fuera así, quitamos un poco de algodón.

Por higiene, conviene que cambiemos el algodón cada 10 o 15 días. 

Consecuencias que produce no apoyar correctamente el talón: Otro problema del calzado plano es que el pie queda recto cuando lo correcto es que el talón quede ligeramente por encima de los dedos. Esto produce una mayor hiperextensión de rodilla y una tensión permanente en los gemelos, lo que puede producir un espolón, talalgia, fascitis plantar, dolores en la rodilla y contracturas en los gemelos y en los isquiotibiales. 

El uso de una talonera de entre 0,5 y 1,5 cm corregirá la rectitud, suavizará el impacto del talón en la pisada y quitará tensión a los gemelos y las rodillas. Estos consejos los puede aplicar cualquier persona que no tenga pie plano u otras patologías del pie. En ese caso, debe ser valorado por un traumatólogo o podólogo y seguir el tratamiento indicado. Está especialmente indicado para deportistas y personas que sufran de talalgia y fascitis plantar. Alexis Alonso. Osteópata
http://saludablemente.es/pisada-talon-arco-consejos.php

jueves, 23 de julio de 2015

APOYO ACUSADO DE TALÓN EN LA CARRERA

Un apoyo acusado de talón genera una característica técnica denominada como frenadora que requiere más energía y presenta cargas diferentes y absorción del impacto distintas que un apoyo más plano contactando con el metatarso y con el tobillo no más adelantado que la rodilla. 

El apoyo realizado con el mediopié es más reactivo, no existe un "desplome" de cadera. Presenta mayor nivel de absorción del impacto en la articulación del pie y tobillo, siendo menor en la rodilla. También en la impulsión, en la pierna de recobro, la rodilla se proyecta más hacia delante por una mayor flexión de la cadera. 

En los corredores que entran de talón, la carga de fuerzas que tiene que soportar la rodilla es mayor aunque es menor la que soporta el tobillo, mientras que en los corredores que toman contacto con el metatarso, sucede lo contrario. Lo que debemos entender con estos dos tipos de pisadas, no es que uno sea mejor que otro, sino que existen diferentes tipos de alteraciones que responden a diferente gestión de fuerzas en la toma de contacto con la superficie. Un corredor que presenta dolor en la zona anterior de la rodilla, quizás debería prestar atención a su toma de contacto para que no sea excesivamente adelantado y conseguir una mayor frecuencia frente a una menor amplitud.
http://www.sportlife.es/correr/articulo/contactar-talon-mediopie

jueves, 20 de noviembre de 2014

MUST SEE¡ HIGH HEELS & ITS HAMRFULL EFFECTS TO THE BODY

"Tacones altos y dolor crónico". A menudo hacemos cosas cotidianas que no pensamos que puedan tener una repercusión en nuestra salud. En este caso me refiero al uso de tacones. Este video explica como nos afecta el uso continuado de zapatos con tacón alto y que rectificaciones se producen en nuestra columna vertebral y por ende en nuestro cuerpo. Todo afecta a todo!
https://www.facebook.com/ivanrf83?fref=nf

sábado, 18 de octubre de 2014

¿QUÉ ZAPATILLAS DE RUNNING NECESITO?

Lo primero que necesitas decidir a la hora de enfrentarte al momento de comprar unas zapatillas de running es la superficie sobre la que vas a utilizarlas, ya que las suelas variarán dependiendo de si vas a realizar tus entrenamientos o carreras en pista, por la montaña, en tierra o por asfalto. Una vez superado el primer paso, debemos asegurarnos de elegir la talla correcta, tómate tu tiempo para comprobarlo y no te fíes del número de tus zapatos de calle o de tus viejas zapatillas. Póntelas en los dos pies y comprueba que sobra alrededor de medio centrímetro entre el dedo más largo y la puntera, así te asegurarás de que el pie no se mueve durante el ejercicio, evitanto rozaduras, ampollas o problemas de estabilidad que te pueden probocar una lesión. La horma del zapato es distinta según cada modelo así que asegúrate de que no te aprietan en los laterales pero que quedan bien sujetas en el empeine. 

Otro elemento importante a tener en cuenta es cuál es tu tipo de arco plantar, que probablemente -aunque no siempre- te indicará también cuál es tu tipo de pisada. Para identificarlo solamente tienes que observar qué huella dejas al salir de la ducha. 

Pie normal: El antepié y el talón están conectados por una zona (al lado del arco o puente) que tiene una anchura de dimensiones un poco menores a las de la huella del talón. Un pie normal contacta con el suelo en primer lugar con la parte exterior del talón y enseguida se inclina ligeramente hacia el interior para poder absorber apropiadamente el impacto.Su pisada suele ser neutra. El calzado que recomendamos es estable y con rasgos de control de la pronación moderados. 


Pie plano: Es menos pronunciado de lo normal; la huella del pie descalzo parece la de un zapato. Suele indicar tendencia a la pronación (el apoyo comienza también con la parte exterior del talón pero el pie se inclina excesivamente hacia el interior, más de lo necesario). El calzado recomendado debe ofrecer control de la estabilidad y de la pronación, con mediasuelas firmes. No se recomienda en ningún caso un calzado con excesiva amortiguación y sin rasgos especiales de control de la estabilidad. 
Pie cavo: La huella se caracteriza por una banda muy estrecha de conexión entre talón y antepié o incluso puede llegar a no existir. Los pies con el arco muy alto tienen dificultades para absorber los impactos y suelen ser supinadores. El calzado recomendado debe tener buena amortiguación y mucha flexibilidad para favorecer la movilidad del pie (reducida). Evitar zapatillas con rasgos de control del movimiento y de mejora de la estabilidad, que reducen la pronación. 

Por último tenemos que atender a nuestro tipo de pisada, es decir si somos "pronadores", "supinadores" o "neutros". Mientras corremos nuestro pie realiza un movimiento de tres fases, una primera de impacto en el suelo, una segunda de apoyo y una tercera de impulso con la parte delantera. La diferencia principal consiste en hacia donde se inclina nuestro pie en la fase de apoyo, si la tendencia es hacia el interior seremos pronadores, mientras que si el apoyo se realiza hacia el exterior seremos supinadores. Las personas con una pisada neutra no realizan ningún desplazamiento lateral. Tipos de pisada Pronador Neutro Supinador Para aquellos que quieran mejorar el apoyo del pie durante la carrera aquí están los consejos de Grant Robinson, atleta de 1.500 y olímpico en Atenas 2004. 
http://www.sportlife.es/deportes/correr/articulo/que-zapatillas-de-running-necesito

viernes, 5 de septiembre de 2014

¿TACONES ALTOS O BAILARINAS?

Cuando te bajas de las zapatillas de running, de la bici o sales del agua ¿Qué calzado eliges? Una mala elección puede ser el origen de tus dolores y lesiones, incluso de los kilos de más que no consigues perder, porque unos zapatos incómodos te hacen volverte perezosa y tiendes a moverte menos. Incluso las “inocentes bailarinas” tienen sus consecuencias. 

 ZAPATO TOTALMENTE PLANO 

El plano total es juvenil y suele ser la elección que todas hacemos a la hora de ir cómodas pero con estilo… aunque los traumatólogos no piensan igual. La mayoría de los zapatos planos no tienen un soporte interno y provocan un estrés en los ligamentos y tendones de la parte inferior y el arco del pie, lo que puede provocar una dolorosa fascitis plantar. Además la mayoría de estos zapatos no tienen amortiguación lo que provoca dolor en el talón al andar, especialmente si tienes un arco pronunciado. Lo que han encontrado en los test de laboratorio es que el calzado plano provoca un 25% más de impacto en el tacón en cada paso en comparación con el calzado con un poco de tacón.

 ¿Cómo evitar el daño? 

Si te gusta el plano has de fortalecer los pequeños músculos de los pies que soportan el arco plantar; basta hacer levantamientos de dedos, elevando el dedo gordo del pie independientemente del resto. Y antes y después de usar bailarinas, estira el tendón de Aquiles sobre un escalón para evitar sobrecargar esta zona tan propensa a lesiones. 

 TACONES ALTOS 

 Te hacen sentir sexy y alargan tus piernas, pero según un estudio danés andar con tacones altos puede aumentar 6 veces el riesgo de osteoartritis. Además de los consabidos problemas de sobrecarga sobre los dedos que pueden provocar deformaciones y juanetes, otro estudio ha encontrado que los “taconazos” provocan que tus rodillas soporten un 200% más estrés, deteriorando el cartílago y aumentando el riesgo de artritis. Además los tacones provocan un arqueamiento de la espalda para compensar la postura adelantada. Si los llevas todos los días, también acortan tus gemelos y pueden atrofiar tu forma natural de andar descalza. 

 ¿Cómo evitar el daño? 

Escoge tacones adecuados, los de 5 cm aumentan un 4% el impacto sobre dedos y rodillas y los de 7 cm un 33%. Deja los tacones altos para ocasiones especiales; calienta tus pies andando de puntillas antes de ponértelos y date un masaje en los gemelos después de usarlos. Lleva siempre a mano otros zapatos más cómodos para cuando acabe la parte clave de la fiesta. Nuestro experto en Fitness Domingo Sánchez nos cuenta en su blog cómo combatir los problemas asociados al uso de tacones altos mediante las sentadillas. Consúltalo aquí. Y en nuestro blog de material te hablamos de las plantillas para zapatos de tacón Podoactiva Elite Woman diseñadas para reducir las molestias y evitar lesiones.
http://www.sportlife.es/mujer/articulo/bailarinas-o-tacones

domingo, 31 de agosto de 2014

¿ES BUENO CAMINAR DESCALZO?

Caminar sin calzado unas horas al día en un ambiente limpio y protegido, como el interior de nuestra vivienda, puede tener beneficios: ayuda a la transpiración natural de la piel, además de permitirnos descansar de tacones y hormas estrechas. Caminar sobre arena fina de playa masajea y relaja los músculos y libera la piel de durezas (actúa como un exfoliante natural). Pero la piel descubierta también está desprotegida y expuesta al medio (como le ocurre a la del rostro o las manos). Se puede deshidratar fácilmente y, por ello, los pies necesitan cuidados adicionales de hidratación, limpieza y fotoprotección cuando están al descubierto. A esto hay que añadir que la ausencia de la amortiguación que proporciona el calzado aumenta la presión que el cuerpo ejerce sobre los pies. Además de que el contacto directo con el suelo lo es también con gérmenes, residuos, suciedad, etcétera. *Dr. Miguel Sánchez Viera, director del Instituto de Dermatología Integral. 

Responde el osteópata 

Desde el punto de vista de la osteopatía, disciplina donde se pone una atención especial en la estructura anatómica y los trastornos mecánicos del cuerpo, andar descalzo es muy beneficioso, sobre todo si se hace sobre superficies rugosas, planas y sin inclinación lateral, sin importar la temperatura. El pie se adapta también muy bien a las superficies con inclinación lateral, aunque se pueden producir sobrecargas musculares en la cadera, glúteos o columna lumbar. Andar sin zapatos, hace que la biomecánica producida en el pie, y en el cuerpo entero como unidad, genera de forma natural una reorganización tensional estructural que alivia la presión producida por el calzado que utilizamos a diario. Un descanso muy recomendable para recuperar la alineación de las articulaciones y el espacio anatómico. Si se padece algún tipo de patología o disfunción –sesamoiditis, metatarsalgias o fascitis plantar…– lo aconsejable es acudir al traumatólogo. 

Andar descalzo es también aconsejable para los bebés: contribuye a su desarrollo en el proceso de interconexión neuronal motora y además les ayuda a reconocer el terreno, a ubicarse mejor en el espacio y afianzar su seguridad día a día. Y para los ancianos, aquellas personas que están sometidas a mucha tensión muscular y emocional cada día y quienes pasan mucho tiempo de pie o sentado. *Raúl Guzmán. Jefe del Servicio de Osteopatía en Clínica VASS, director de formación en el Instituto de Formación y Desarrollo Clínico IFENTI. 

 Responde el podólogo 

El ser humano está diseñado para caminar descalzo y en la naturaleza. Hacerlo en casa o sobre superficies inventadas por el hombre –más duras y lisas, y por tanto más nocivas– de forma repetida puede provocar lesiones en los pies. No estamos diseñados para andar por la ciudad, es una mala superficie para nosotros. De ahí que se inventara el calzado para evitar la agresión que supone el contacto el terreno. Ir sin zapatos fortalece los pies y mejora la circulación sanguínea: en ellos existe una red circulatoria profunda que impulsa la sangre al corazón cuando andamos correctamente. Ahora los expertos están observando que el pie del hombre moderno no es tan fuerte como el de nuestros ancestros. Lo ideal es ir descalzos una hora al día por superficies naturales. 

Para aquellos que viven en la ciudad un magnífico ejercicio para ejercitar nuestro sistema músculo-esquelético es subirse a una bossu, media pelota de Pilates que se apoya en el suelo y cuya superficie blanda obliga a mantener el equilibrio, lo que fortalece músculos y ligamentos. Andar con los bordes externos de los pies, sobre los talones y de puntillas son también buenos ejercicios. Nada que no se haya inventado hace años e incluso siglos. Barefoot es el nuevo nombre para un deporte que consiste en correr y andar descalzo y que ya se practicaba en Florida en 1947. Si se practica es recomendable incrementar la intensidad del ejercicio poco a poco por la falta de costumbre; cuando se es un experto es una gran forma para fortalecer nuestros pies. *Ángel González de la Rubia, podólogo deportivo y cofundador de tulesiondeportiva.com. Coordinador de la Maratón de Madrid. http://elpais.com/elpais/2014/07/18/buenavida/1405670927_525149.html

lunes, 9 de junio de 2014

¿PRONADOR, NEUTRO O SUPINADOR?


¿No sabes si eres pronador, supinador o neutro? Es más, ¿no sabes ni lo que te estamos diciendo? El pie disipa la energía del impacto de cada zancada inclinándose hacia dentro al hacer el apoyo. Este giro del pie, que se inclina sobre su eje longitudinal de forma que el puente se aproxima más al suelo, es lo que se llama pronación. Todos pronamos, pero según en qué medida decimos que tenemos una pisada pronadora (si el movimiento es excesivo), neutra (si es normal) o supinadora (cuando no pronamos lo suficiente en el apoyo). Lo ideal es consultar con un podólogo y hacerse una prueba de pisada en un centor especializado, aunque puedes tener una ligera idea con estos datos.


Pronador 

El pie rota hacia dentro más de los 15º ideales de inclinación, así que tiene problemas para estabilizar el cuerpo y no se absorbe bien el impacto. Necesitas calzado con control del movimiento.


Neutro 

Desde que se da el primer contacto del talón con el suelo el pie gira 15º hacia dentro, amortiguando el impacto de la zancada por toda la superficie del pie. Usa calzado neutro.

Supinador 


El pie no gira lo suficiente, por tanto no amortigua bien y el impacto se concentra en la zona externa del pie. Necesitas calzado con muy buena amortiguación. Para corregir estos errores, es importante reeducar tu pisada y realizar ejercicios de técnica. Ganaras eficiencia de tus carreras y notarás la diferencia. 

http://www.sportlife.es/deportes/correr/articulo/pronador-neutro-supinador-aprende-forma-pisar


jueves, 27 de febrero de 2014

APRENDER A CAMINAR NO ES COSA DE NIÑOS

UN MAL HÁBITO CONDUCE A LESIONES

La recomendación más habitual en la consulta de un médico es realizar ejercicio moderado y la opción estrella en este sentido es caminar. Pero ¿sabemos hacerlo? Examinamos las reglas básicas para que este ejercicio natural no pase de fuente de salud a origen de lesiones. Aunque la mente también se beneficia de la movilización del cuerpo, los principales beneficios de caminar son la función cardiaca, la respiratoria y la sanguínea. 

Caminar aumenta el latido cardiaco y mejora la contracción del corazón, ayuda a mantener una respiración constante más saludable para oxigenar el organismo y además mejora la circulación sanguínea de retorno, con lo que mejoran síntomas como las piernas cansadas o trastornos como las varices. Los músculos también obtienen beneficios tras caminar de forma sostenida y con ellos la salud de los huesos también se refuerza. 

CAMINAR SÍ, PERO BIEN 

José Santos, fisioterapeuta y Secretario General del Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid, recomienda seguir las siguientes pautas para conseguir los beneficios saludables de caminar y evitar lesiones: 

1. Realizar un pequeño calentamiento inicial. Pueden consistir en hacer movimientos de rotación de los pies con movimientos de tobillo. 
2. Caminar con una zancada natural. La forma de andar es muy importante para prevenir lesiones. Hay que evitar realizar zancadas más amplias pensando que así se rinde más al caminar ya que sobrecargan los ligamentos de la pelvis y los músculos esqueléticos. La biomecánica natural lleva a realizar un aterrizaje con el talón y a tomar impulso con el antepié, de esta forma el cuerpo humano consigue repartir de forma equilibrada todo su peso en una estructura ósea tan pequeña como el pie. 
3. Utilizar el braceo como parte del ejercicio. El cuerpo necesita de los brazos para equilibrar el paso, así las extremidades superiores e inferiores se contrabalancean y el ejercicio implica de forma global al individuo. Si se camina en el campo, además de ayudar con las inclinaciones del terreno, los bastones de marcha, similares a los de esquí, ayudan a realizar un ejercicio consciente con la parte superior del cuerpo. 
4. Treinta minutos diarios sin detenerse. La actividad sostenida es la que reporta los mayores beneficios al caminar. 
5. Comenzar en terrenos planos con poca inclinación y mejor tierra que asfalto. Si se está comenzando a instaurar el hábito de caminar o bien se sale de un periodo en el que se ha restringido la movilidad general, es conveniente comenzar en lugares en los que no existan cuestas o pendientes y si es posible hacerlo en parques públicos o caminos de tierra en los que la pisada es más suave. 
6. La clave del éxito: utilizar un calzado adecuado para el terreno y la estación del año. Asfalto o tierra, piso húmedo o seco, inclinación o planicie, verano o invierno, existen distintos tipos de calzado que sujetan el pie y lo protegen de las condiciones ambientales y de las lesiones. Lo principal es que el calzado no aporte inestabilidad al talón, con lo que se evitan esguinces, y que amortigüe la pisada, ya que esto puede provocar desde inflamación (fascitis plantar) hasta una fractura por estrés causada por el exceso de presión. 

ERRORES MÁS COMUNES 

Santos recuerda que hay que evitar una serie de malos hábitos o prácticas que pueden restar eficacia al caminar o bien perjudicar al organismo, entre ellos: - Utilizar el calzado del trabajo para caminar. Si se desea ir caminando al trabajo es aconsejable utilizar un calzado apropiado y cambiarlo al llegar a la oficina. 

- Emplear calzado nuevo. Los zapatos necesitan una adaptación al pie que si se realiza de forma brusca puede causar rozaduras o ampollas. 
- Usar tobilleras. Aunque se crea que pueden evitar los esguinces, en realidad impiden la circulación sanguínea de retorno y atrofian la sensibilidad del tobillo para adaptarse al terreno. Si además se utilizan pesos para realizar un mayor esfuerzo se pueden lesionar las rodillas al sobrecargarlas. 
- Aumentar el ritmo para aumentar los beneficios. Si se desean conseguir más beneficios de caminar hay que aumentar la duración del ejercicio y no forzar al organismo con una intensidad para la que puede no estar preparado. 
- Detenerse a mirar escaparates o a conversar. Para que los 30 minutos de ejercicio sean eficaces el ritmo debe ser sostenido. 
- Olvidar el braceo. Aunque se tenga frío hay que evitar meter las manos en los bolsillos porque se altera el equilibrio natural del cuerpo al caminar. 
- Creer que una pendiente supone menos esfuerzo. Cuando se camina cuesta abajo el cuerpo debe ir frenando y las articulaciones deben ejercer un mayor esfuerzo en el movimiento de descenso. 
- Pasar por alto la importancia de los calcetines. Es fundamental que no se formen arrugas en el calcetín porque pueden dar lugar ampollas y rozaduras. 

ACUDIR A LOS EXPERTOS 

Por último, Santos recomienda acudir a los especialistas cuando se necesite consejo o se detecte algún tipo de lesión o molestia. Así, ortopedistas, podólogos y fisioterapeutas pueden ayudar en el día a día de quienes deseen adaptar mejor sus peculiaridades físicas al caminar ya sea a través de un análisis de la pisada, conseguir un calzado adaptado, mejorar las condiciones físicas de los pies o asesorarse para evitar o tratar posibles lesiones.
MADRID, 23 Feb. (EUROPA PRESS

sábado, 1 de febrero de 2014

¿PISAS CON EL MEDIOPIÉ?

En los diversos foros, páginas webs, e incluso publicaciones escritas que versan sobre running, cuando se habla de biomecánica o de la pisada del corredor, usualmente se enumeran tres tipos: antepié, mediopié y retropié. Esta división es lógica hasta cierto punto, y por supuesto, comúnmente aceptada por la comunidad; nosotros mismos desde este humilde sitio hemos usado esta catalogación de la pisada cuando hemos hablado de zapatillas o cualquier otro tema relacionado con el running. 

El caso es que el otro día estando de visita por un foro de habla inglesa, me encontré un anónimo usuario que propuso la idea de que la denominación de pisar de mediopié no tenía sentido. Como en todo foro que se precie, el hilo siguió creciendo, y a medida que iba leyendo las diversas opiniones, más estaba de acuerdo con el concepto inicial: pisar de mediopié (entendido como tal) no existe, es físicamente imposible. Vayamos al grano. En principio, y ateniéndonos a lo que generalmente se entiende por pisada de mediopié, podríamos decir que es aquel pie que mientras corre, aterriza plano, o de manera paralela con la superficie. Pero si nos paramos a pensar un poco y nos fijamos en la anatomía de la extremidad, nos damos cuenta de que a no ser que el pie esté deformado, es imposible aterrizar con el mediopié, a menos que pisemos sobre una superficie curva, como una roca o similar. 

Nuestro pie está diseñado para ser apoyado, hablando de manera general, en dos puntos: los metatarsos y el talón, y la función de la parte media (arco plantar) no es la de apoyar ni la de recibir impactos, sino la de suavizarlos, flexibilizar el pie y estabilizar la extremidad; la prueba más clara es pisar una piedrecilla con él y comprobar lo poco agradable que es. zonas del mediopié Quizás alguna que otra vez, corriendo por superficies irregulares, y por supuesto, sin tener la intención previa de hacerlo, nuestro pie aterriza de mediopié, pero en ningún caso se podría afirmar que alguien tiene una pisada de este tipo de manera permanente. Tal vez el origen del término habría que buscarlo en aquellos corredores populares que usando zapatillas tradicionales con amortiguación y caída talón-puntera, aterrizan con los metatarsos, pero realmente, con semejante añadido de goma o espuma en la zapatilla, dicha empresa es imposible. 

Así, lo que creen es que apoyan todo el pie a la vez, plano, horizontal, de mediopié, pero lo que realmente ocurre es que en el interior de la zapatilla, la extremidad sigue cayendo con la parte delantera (metatarsos), mientras que la parte exterior del arco plantar intenta realizar la función de absorción del impacto. Evidentemente, todo el proceso que implica el impacto, reducción y absorción del mismo, pronación, y estabilización del cuerpo, se ve drásticamente mermado por el uso de zapatillas amortiguadas, ya que el pie no funciona de manera natural, y se entrega a las protecciones artificiales de la zapatilla en cuestión. Intentando ser un poco más comprensivo y técnico a la vez, vamos a analizar de manera coherente la expresión pisar de mediopié. Realmente, este término se aplica para las pisadas que simultáneamente aterrizan con el talón, la base del quinto metatarso y el margen exterior del pie. 

Y aunque desde hace muchos años se emplea en la literatura relacionada con el running y la biomecánica el término “flat-foot” (pie plano), no podemos aceptar que es una definición correcta para un tipo de pisada. El aterrizaje, o primer punto de impacto del pie siempre se produce en algún punto en concreto, y nunca puede hacerse con todo el pie a la vez. Incluso si contamos la opción antes descrita de la simultaneidad del quinto metatarso, el margen exterior del pie y el talón, no podemos admitir que se pisa con todo el pie, con el pie plano, o con el mediopié. Estaríamos perpetuando el error de denominación. Esta interesante cuestión, al margen de definiciones más o menos técnicas, nos deja algunas reflexiones: Correr, o mejor dicho, correr “correctamente” no es tan sencillo, y mucho menos si impedimos que nuestros pies funcionen de manera natural. 

Éste y otros temas relacionados con la pisada, la biomecánica y la anatomía, cobran importancia al surgir la más o menos reciente opción de evitar pisar con el talón (otra consecuencia más de la llegada del barefoot/minimalismo). Pese a no haberse extendido y seguir siendo un movimiento minoritario, el barefoot/minimalismo ha servido para que muchos profesionales del running y la medicina deportiva se cuestionen términos y conceptos aceptados desde hace décadas. Qué sencillo de entender, e incluso de practicar, resulta todo este tema cuando se corre descalzo/minimalista. Qué bien responde el cuerpo cuando se le escucha, se le cuida y se le hace caso. 

http://www.correrdescalzos.es/mediopie/ POSTEADO POR LA GAZZA LADRA

martes, 10 de septiembre de 2013

LAS PLANTILLAS APENAS ALIVIAN EL DOLOR EN PACIENTES CON OSTEOARTRITIS

PESE A LA CUÑA LATERAL QUE LLEVAN 


Una revisión de estudios dirigida por la Universidad de Boston (Estados Unidos) ha demostrado que el uso de plantillas ortopédicas con cuña lateral para los pies apenas sirven para aliviar el dolor de quienes sufren osteoartritis de rodilla, según informa el 'Journal of the American Medical Association' (JAMA). Para el trabajo analizaron 12 estudios que en total incluían a 885 personas con osteoartritis de rodilla; de las que aleatoriamente se seleccionó a 502 que habían utilizado las plantillas, entre dos semanas y dos años según el estudio. De este modo, vieron que los usuarios de plantillas con cuña lateral valoraban su nivel de dolor con una media de 18 puntos, apenas dos puntos menos que quienes utilizaban plantillas planas o de ningún tipo. Y cuando comparaban con placebo, el beneficio era nulo. 

"Esto no significa que no se puedan utilizar tratamientos efectivos con los zapatos", dijo el doctor David Felson, de la Facultad de Medicina de la Universidad de Boston y coautor de la investigación, quien confía en que se siga investigando para desarrollar plantillas más eficaces. Generalmente este tipo de productos suelen tener una cuña en el talón que suele ser más delgada en el extremo externo que en el interno, lo que fuerza al pie a ir hacia dentro para tratar de equilibrar la carga sobre las articulaciones de estos pacientes. Por su facilidad de uso, las plantillas con cuña lateral suelen ser "un tratamiento atractivo", dijo el otro coautor del estudio, Matthew Parkes, del Instituto de Inflamación y Reparación de la Universidad de Manchester (Reino Unido).
NUEVA YORK, 23 Ago. (Reuters/EP) 

domingo, 28 de octubre de 2012

EL MEJOR CALZADO INFANTIL

PODOLOGÍA |

El 10% de las visitas al podólogo tienen como protagonistas a niños y jóvenes; sin embargo, muchos problemas serios podrían prevenirse acudiendo a la consulta a tiempo. Coincidiendo con el 43 Congreso de Podología que estos días se celebra en Valladolid, un especialista da las claves para mimar los pies de los más pequeños. Descalzos hasta que caminen Aunque las tiendas de moda infantil están llenas de botitas y zapatos para recién nacidos, Roberto Pascual, profesor de Podología en la Universidad Miguel Hernández de Elche, señala que el calzado no es necesario hasta que el niño sea capaz de caminar por sí solo. 

"En la etapa de gateo y pregateo, sólo sirve de protección frente al frío", destaca este podólogo. La clave está en la exquisita sensibilidad que tienen las plantas de los pies al nacer ("mayor que la de las manos"), de manera que al calzarles se reduce la información que reciben del medio que les rodea y su capacidad de interactuar con éste. Primeros (y flexibles) pasos A la hora de elegir sus primeros zapatos, Pascual recomienda que sean "lo más flexibles posibles", y con algún tipo de sujección (como el velcro). 

A partir de ahí, añade el podólogo, la clave está en adaptar el calzado a las actividades que vaya desarrollando el niño; con zapatos cada vez menos flexibles (sin llegar a ser rígidos) y con algún tipo de contrafuerte en el talón. Es importante, añade, no usar botas ni calzados más altos del tobillo. "Cuando se piensa en el calzado infantil, los padres tienden a pensar en modelos que le den estabilidad; pero es a la inversa. El pie tendrá estabilidad por sí solo, el zapato no puede suplir las funciones del pie". Signos de alerta "Lo normal es que los padres no detecten ningún signo de alerta hasta que el niño ya ha alcanzado una marcha más o menos estable, hacia los tres años", explica, "porque antes de esa edad es difícil". 

Aunque en algunas comunidades los pediatras realizan una revisión del pie hacia los cuatro o cinco años y pueden remitir a un podólogo infantil si detectan alguna anomalía, "lo normal es que los padres vengan por comparación con otros niños. 'Mi niño camina torpe', 'se tropieza', 'anda más raro que su amigo'...", explica Pascual. En la mayoría de estos casos no tiene porqué haber nada patológico, tranquiliza, simplemente que algunos niños tienen quizás un desarrollo motor más lento. ¿Cuándo hay que preocuparse? Los dos motivos de consulta más habituales en las consultas de los podólogos infantiles son los pies planos y, como decía anteriormente Pascual, 'mi niño anda raro' (bien de puntillas o con las puntas de los pies giradas hacia el interior). 

En cada caso debe ser un podólogo especializado en niños quien valore si existe un problema, aunque como añade este experto, los padres deben saber que los pies planos son normales hasta los seis u ocho años. "A partir de ahí se valora si el pie es flexible, si el niño está asintomático, si tiene molestias, antecedentes familiares, hiperlaxitud en las articulaciones u otros factores de riesgo (como la obesidad)", apunta. En caso de que el diagnóstico sea, efectivamente, un pie plano, añade, las plantillas no son la única solución: "El podólogo puede valorar un tratamiento con fisioterapia o de rehabilitación postural". A su juicio, lo importante es detectar cualquier problema a tiempo, para poder tratarlo cuanto antes; "aunque -por ser la nuestra una profesión privada- no es extraño que muchos padres lleguen al podólogo 'de rebote', después de visitar a varios pediatras y traumatólogos infantiles".
María Valerio | Madrid