sábado, 15 de febrero de 2014

CONCEPTOS DE EVOLUCIÓN -INVOLUCIÓN


Principios SE
1. Nadie te puede curar. El cuerpo es un organismo que se autoregula y se autorreorganiza por sí mismo. Tu trabajo y el de cualquier “sanador” (ya sea médico o no) es colaborar con ese proceso. Quitar las elementos que el cuerpo no necesita (detoxificar) y añadir los que necesita (nutrir).

2. Ya lo decía mi abuela…Más vale prevenir que curar. El momento de invertir en nuestra salud es cuando estamos sanos.

 3. Respeta el templo. Ya sea fruto del azar (neodarwinismo), de un plan divino (creacionismo) o de otra posibilidad no comprendida todavía…La realidad es que nuestro cuerpo es una obra maestra que ningún ser humano podría concebir, mucho menos realizar. Es decir, es un producto acabado sin fallas que sabe lo que necesita en cada momento. Aprende a escuchar al cuerpo y sus señales: sé su mejor aliado.

4. Anticípate a lo que quiere. Nuestros genes se han adaptado por milenios a una dieta, una forma de ejercitarse, una forma de traer niños al mundo y a un estilo de vida natural. Sigue esta lógica e intenta en lo posible acercarte a ese ideal, tu cuerpo te lo agradecerá.

5. Las enfermedades no importan. No importan porque cuando nos diagnostican una enfermedad, no nos dan ninguna información sobre la causa de la misma: son sólo un conjunto de síntomas con un nombre. La enfermedad, la que sea, es simplemente el esfuerzo del cuerpo por re-equilibrar un medio interno que ha sido alterado gravemente con el paso del tiempo y nuestro estilo de vida inadecuado. La curación de cualquier enfermedad es equilibrar el sistema (el cuerpo) en su conjunto.

6. Todos los enfoques médicos tienen su aplicación. Dependiendo del problema unos enfoques son mejores que otros. Por ejemplo, la medicina alopática convencional es la mejor para tratar los traumas y las emergencias, pero hay otras alternativas más seguras y efectivas para tratar las enfermedades (medicina funcional,…etc.). Hay un médico adecuado para cada situación y hay que saber por dónde empezar.

7. Soy mi mejor doctor. A menos que sea una emergencia, no permitas una intervención médica si no estás totalmente de acuerdo. Tú conoces tu cuerpo mejor que nadie. Sigue tu instinto y tu entendimiento y siempre, siempre, pide segunas y terceras opiniones. “Lo primero es no hacer daño” Hipócrates.

8. Hay que estar abierto a alternativas. Lo “convencional” está constatemente cambiando, y en lo científico también. Si no fuese así todavía viviríamos en las cavernas. Pero no todo lo diferente es bueno per se. Prueba aquellas terapias que no entrañan ningún peligro y consideres que tienen sentido. Lo que hoy es “pseudocientífico” (como la medicina energética) podría convertirse en la medicina del futuro.

9. Eres (literalmente) lo que comes. La comida no es sólo un factor más que nos afecta, es el factor principal. Si aquello que introducimos directamente en nuestro cuerpo y se convierte en nuestra “carne” no nos afecta, ¿entonces qué lo hará? Sigue una dieta totalmente natural y “deja que el alimento sea tu medicina”…

10. Contar calorías es una tontería. Lo que cuenta no son las calorías, sino lo que asimilamos tras la digestión y asimilación del alimento y cómo afecta a nuestros distintos sistemas (hormonal, inmune…etc). Hay que centrarse en alimentos con “ganancia neta” tanto de energía como de nutrición (enzimas, minerales, vitaminas, fitonutrientes…etc) superior, como los superalimentos. De esta forma nuestra salud y peso ideal reaparecerán naturalmente.

11. Cada eleccion cuenta. Como la kinesiología aplicada ha demostrado, cada pensamiento y cada alimento tiene una influencia, por pequeña que sea, que debilita o fortalece tu cuerpo y tu mente. La acumulación de estas elecciones es lo que a largo plazo nos da unos resultados positivos o negativos.

12. Cada elección cuenta, pero….No te obsesiones. Los cambios deben darse poco a poco y a un ritmo natural para que se incorporen a nuestra rutina de forma sostenible y con poco esfuerzo. Sigue el principio 80/20.

12+1. Modifica el terreno. No hay que “luchar” contra las enfermedades ni contra los parásitos, sino modificar el medio interno del cuerpo (mejorando nuestra nutrición y detoxificándonos) para que los invasores externos no medren en él y para que la expresión de nuestros genes sea la correcta. No enfermamos o nos sentimos vitales y saludables por casualidad. Por eso, “curar” una enfermedad no es realmente efectivo si no se tratan las causas, eso es simplemente enmascarar los síntomas, que reaparecen de forma más virulenta. Tenemos que trabajar el medio interno asegurándonos de aportar al cuerpo lo que necesita y nada más.

14. Más años de vida, pero sobre todo, mas VIDA a mis años.

15. La salud es sólo el principio. Estar sano es parte del desarrollo integral del ser humano pero no el fin en sí mismo. La salud es la puerta que da paso al bienestar y a todo lo bueno de la vida. http://www.saludestrategica.com/sobre-salud-estrategica/principios-salud-estrategica/

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