CULTURA | Iniciativa en Chamberí
-¿Son los libros gratuitos?
-Totalmente. Puedes llevártelos sin ningún tipo de coste.
-¿Y cuántos me puedo llevar?
-Todos los que quepan en tus bolsillos
Así, sin más. No hay truco. No es una oferta especial, ni unas rebajas anticrisis. Es un pequeño local en la calle de Covarrubias 7, bajo derecha (Chamberí), donde la cultura no tiene ataduras. Bienvenidos a Libros Libres.
El espacio está inspirado en una experiencia similar norteamericana que triunfa en Baltimore desde hace ya 13 años.
Una voz amiga hizo llegar la idea a la ONG Grupo 2013, dedicada a financiar la educación de niños de distintos países y fomentar la calidad de la enseñanza en España.
Sobre esta base, un grupo de cuatro socios decidió apostar por la creación de una librería que rompiese con todos los impedimentos y barreras y donde los libros se convirtiesen en algo más que una mercancía.
"Nuestra misión es hacer llegar libros a todas aquellas personas que deseen tenerlos, de una manera gratuita, abarcando todo tipo de clases sociales", explican los artífices del proyecto.
Cada ejemplar lleva un sello que dice: "Este libro es libre, no se compra ni se vende". Un 'crossboking' sin precedentes que espera cumplir más de un año en la capital.
Para ello, confían reunir al menos a 365 suscriptores que, por tan sólo 12 euros anuales, ayuden a sufragar los costes del local. Aunque también aceptan voluntarios, donaciones literarias o simplemente "un café y un trozo de tarta".
Apoyo a la iniciativa
Desde que abrió sus puertas en septiembre, hace apenas dos semanas, casi 300 personas han podido disfrutar de este pequeño oasis literario y más de 140 han apoyado la iniciativa a través de una suscripción. "La mayoría de las donaciones vienen de particulares o de empresas que colaboran con nosotros", cuentan.
Una peluquería convertida en un acogedor local en el que los libros inundan las paredes y "que se convierte también en un punto de encuentro, donde la gente comparte su gusto por la lectura", afirman. Novelas, poesía, teatro...
Todo tipo de géneros tienen cabida en sus estanterías, cuyo contenido espera acabar en las manos de cualquier persona que pase por el barrio de Chamberí y sienta el 'gusanillo' de leer. "Es similar al servicio que ofrece una biblioteca, pero sin tener que devolver nada", comparan sus creadores.
Aunque la oferta va más allá. El espacio cuenta con una videoteca de Cine Libre. Así, todo amante del séptimo arte podrá llevarse a casa una película y devolverla en dos semanas. También se pueden comprar, eso sí, siempre que esté repetida y sólo por un precio simbólico.
"Lo principal es facilitar el acceso a algo que, en la situación económica que atravesamos, es donde la gente más recorta.
Creemos en la educación como base para el crecimiento y el desarrollo personal", aseguran. Una apuesta solidaria por la cultura en tiempos de crisis que ha encontrado su sede y que espera sobrevivir al temporal con y gracias a todos los madrileños y vecinos del barrio.
Macarena Pérez | Madrid
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