Miles de estudiantes comenzarán este año 4º de ESO, el primer curso en que el tendrán que elegir un itinerario y asignaturas que condicionarán su futuro profesional. Muchos ya han tomado estas decisiones, pero otros están planteándose qué hacer en septiembre. Si para muchos ya puede resultar complicado elegir qué itinerario seguir en el futuro, la situación resulta más difícil al tener en cuenta que progresivamente se implantará una nueva ley educativa (LOMCE) que puede afectar a la trayectoria académica. De hecho, los alumnos que este año cursen 4º de ESO tendrán todavía los itinerarios y materias que dicta la LOE, pero al año que viene cuando empiecen 1º de Bachillerato o FP Grado Medio tendrán la configuración que marca la nueva LOMCE. Habrá diferencias, pero sea cual fuere las opciones elegidas, siempre se puede rectificar en cursos venideros, como advierten diferentes expertos.
A estas edades, con 15 años, puede ser muy difícil todavía tener claro qué profesión u oficio se quiere ejercer en el futuro. Esa no es la clave que determina las decisiones, sino que el alumno oriente su camino según sus capacidades y gustos. Algo que podrá garantizar su éxito académico. «Lo importante es identificar cuáles son los intereses, las capacidades, las competencias y la personalidad de cada uno. A partir de un autoconocimiento se puede construir un itinerario personal y profesional. "Querer ser" es un mito no realista, lo importante es identificar si lo que uno quiere es lo que realmente encaja con sus características», recomienda Neus Bosch, psicopedagoga y orientadora profesional de Educaweb, un portal privado dedicado a la prestación de servicios de orientación profesional a personas, instituciones y centros de formación, y de consultoría educativa a empresas.
Los que pueden ayudar
Tutores, orientadores, profesores y los propios padres pueden ayudar mucho a los estudiantes a descubrir cuáles son sus puntos fuertes y débiles en su formación, como aconseja Carlos Pajuelo, psicólogo, orientador en el Equipo Psicopedagógico de Atención Temprana de la Consejería de Educación y Cultura de Extremadura y autor del blog de Escuela de padres. Y en virtud de ellos tomar una decisión. «Los tutores pueden aportar mucha información sobre las competencias de sus alumnos y además los centros cuentan con los mejores especialistas: los orientadores. Ambos profesionales son grandes recursos para que los padres pueden ayudar a sus hijos a tomar estas decisiones académicas», explica.
«Hau que conocer cómo eres y no cómo crees que eres»
Carlo Pajuelo también coincide en la importancia de conocerse a uno mismo. «Conocerse es fundamental, conocer cómo eres y no cómo crees que eres, conocer tus competencias, ser consciente de ellas y tus limitacines. También hay que cuestionar los gustos. Puede que un chico quiera ser médico o bombero. Se tiene que preguntar qué hace y qué habilidades se requieren para esa profesiones.
Correlacionar las competencias y límites propios con los gustos y con lo que se requiere para eso que te gusta puede ayudar a tomar un camino. Y sin temor a darle la vuelta».
Para ayudar en este proceso Educaweb dispone de una herramienta muy útil en su web. Se trata de un test de orientación que tiene como finalidad profundizar en el autoconocimiento, entender mejor como es uno y hacerle reflexionar sobre lo que quiere hacer, para determinar qué estudios u ocupaciones pueden proporcionar una mejor satisfacción.
Informarse sobre estudios futuros
Conviene hacer también otra tarea: conocer las asignaturas de 4º de la ESO, la oferta de bachillerato e incluso los estudios universitarios que existen actualmente y las universidades.
Si a pesar de realizar todos estos pasos, existen dudas y todavía el alumno no está seguro, siempre se puede elegir por eliminación.
«La eliminación es una estrategia que puede ayudar a la reflexión, a valorar los estudios y profesiones que más interesan. Después de eliminar los estudios y profesiones que no le interesan, podrá centrar su atención en buscar información sobre estudios y profesiones que le interesen», explica la psicopedagoga Neus Bosch.
En cualquier caso, siempre es posible rectificar. Volver a coger otro nuevo camino, pues también hay que tener en cuenta que el alumno evoluciona. Eso sí, a veces «las rectificaciones son a costa de perder uno o dos cursos, pero mejor desandar lo andado para que el tortazo no sea mayúsculo», asesora Carlos Pajuelo.
http://www.abc.es/familia-educacion/20140826/abci-comoelegir-asignaturas-201407241231.html#.VARfSd-Hlhw.facebook
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Por favor, se respetuoso.
Gracias